Por más que lo intentemos, siempre habrá situaciones que se saldrán de nuestro control y nos harán irritarnos, causando que pasemos un mal día, y acumulando más estrés del que teníamos previamente. La ira no es amiga de nadie, afecta a la mayoría de las personas y cuando dejamos que se apodere de nosotros, los resultados pueden afectar nuestra salud por completo. Por tanto es nuestro deber evitarla. Un minuto de ira arruina todo tu día y afecta tu salud ¿Cuántas veces has despertado molesto o has visto como una sola cosa que ocurre puede hacerte pasar un mal día? sin duda a todos nos ha pasado. De pronto alguien dice o hace algo que nos irrita y de manera inmediata reaccionamos mal, no solo con esa persona, sino con nosotros mismos. Estas reacciones pueden considerarse como algo normal, pero ¿acaso tener gripe no es algo normal? Cuando enfermamos de gripe al menos una vez al año, consideramos esto algo habitual a lo que estamos acostumbrados, y la gripe afecta nuestro sistema inmunológico. Pues bien, esto mismo ocurre cuando tenemos un berrinche. Estudios científico han demostrado que al igual que otras enfermedades, la ira y el odio puede afectar nuestro sistema inmune durante un lapso de hasta 6 hora o más dependiendo de tu nivel de enfado. No por nada, cuando te enfadas notas que ciertas partes de tu cuerpo se tensionan y comienzan a doler sin haber una razón aparente de ello. Es por eso que al igual como intentamos evitar que nos dé gripe, así también debemos evitar enojarnos, llenarnos de ira e incluso odiar. Para que esto sea posible te daremos algunos consejos: __Aprovecha que tu cerebro no sabe distinguir lo real de lo imaginario y úsalo para recordar momentos agradables en tu vida. Algo que solemos hacer es que cuando estamos enojados o tristes, recordamos situaciones dolorosas o molestas que solo agravan nuestro estado. Si buscas alimentar tu mente con momentos positivos tu nivel de enojo se reducirá. __Mira algo hermoso. Según el doctor en neurociencia Rick Hanson, al cerebro humano le toma solo 12 segundos contemplando un bello paisaje para sentirse mucho mejor. __No busques exagerar las situaciones. Como bien sabes, estamos acostumbrados a sumarle más cosas a todo lo malo que nos pasa, y conforme vamos repitiendo la historia de lo ocurrido, lo vamos exagerando más y más. Ante esto, es hora de que te sientes a reflexionar, primero aísla el problema principal. Y es que suele pasar que en un día malo tienden a suceder más y más cosas malas, o al menos así lo vemos. Por tanto, cetra el problema y míralo desde una perspectiva más real, así podrás buscarle una solución más adecuada. __Finalmente, respira y date cuenta que la vida está llena de altibajos, vive cada día plenamente y cuando llegue el día malo solo consiéntete pero sin alimentar el lobo de la rabia, verás como todo se resuelve más fácilmente.
